La noticia no es nueva, pero no por ello deja de ser preocupante. Esperemos que en los próximos meses podamos hablar de soluciones y de un crecimiento que vaya sacando al sector almeriense de la crisis actual.
Las principales causas de la crisis del invernadero almeriense son conocidas, pero hagamos un repaso:
Aumento de los costes de producción para el agricultor.
Pérdida de peso de los agricultores en la distribución, lo que les impide obtener buenos precios de venta.
Competencia exterior de países con mayores niveles de productividad (fundamentalemente europeos) o con menores gastos de producción (Marruecos, MERCOSUR).
En esta coyuntura, en la que los invernaderos almerienses han demostrado estar obsoletos, la Junta de Andalucía ha lanzado un programa de ayudas dotado con 120 millones y tres años de vigencia para financiar al 50% la remodelación de los invernaderos. Se plantean múltiples alternativas para la modernización de los invernaderos, por ejemplo con el uso de paneles fotovoltaicos, que además de permitir una mayor autonomía energética, generen un excedente que pueda venderse.